Lilo es un perro Chihuahua, originario de San Miguel de Allende Guanajuato, protagonista de un libro infantil de mensajes de afecto, amor y amistad. La familia que adopta a Lilo está conformada por tres niñas: Sara, Nina, Maya y sus Padres; una familia que busca una convivencia en armonía y, sobre todo, disfrutar las cosas simples de la vida que de pronto pasan desapercibidas. Lilo y las propinas de la vida (Ed. Selector) es una historia que no se complica las cosas de más y se ciñe a la literatura juvenil más juguetona; Marvin platicó con Martha Elena Romero, escritora que reside en Texas y que lleva 20 años de trayectoria escribiendo para niños.
TXT:: Juan Nicolás Becerra
¿Háblenos como fue el encuentro del protagonista de su libro con su familia real?
Sucedió casi como lo narro en la historia, que de hecho es muy biográfica. Lilo fue comprado en una tienda de antigüedades en San Miguel de Allende, Guanajuato. Siempre me ha parecido muy especial, por no decir surreal, la manera en la que Lilo llegó a nuestras vidas y por mucho tiempo tuve la inquietud de plasmarlo en una historia.
Martha Elena Romero, ¿Cómo fue educado Lilo y cómo se vincula con la historia?
Básicamente como cualquier mascota, con mucho cariño, pero llamándole la atención y tratando de evitar ciertas situaciones. Por ejemplo, en la historia se hace mención de Lilo subiéndose a la mesa para probar comida, pues es gran aficionado a probar distintos sabores. Digamos que no le hace el feo a ningún tipo de alimento, desde betabeles hasta manzanas, y aunque la situación se antoja cómica, es algo que como en el cuento, tratamos de evitar que nuestras mascotas hagan.
¿Cuáles son las debilidades de Lilo?
Sin duda, los aromas y los sabores, en especial los dulces. Aunque también tiene una gran debilidad y amor desmedido por las 3 niñas que aparecen en la historia; cariño que es recíproco. Siempre busca la manera de sentirlas cerca. En el cuento vemos, por ejemplo, que mientras ellas están en la escuela, Lilo recurre a sus zapatos para confortarse con su olor.
¿Y de usted, cuál es su propina favorita de vida?
Puedo decir que a través de los años he aprendido a disfrutar las pequeñas propinas tanto como las grandes. Disfruto mucho hacer el recuento y el repaso cada día. Desde una galleta casera hecha por una amiga, beber café en la taza especial, recibir un mensaje inesperado, hasta poder ver y abrazar a un ser querido. La verdad es que entre más atentos y agradecidos seamos, más fácil será que estas “propinas” nos alegren y hagan el día.
¿Qué tal la experiencia en la reciente FIL 2021 para Martha Elena Romero?
Fue una maravillosa. Por muchos años soñé con poder estar en la FIL con un libro propio, y esta ya es la segunda ocasión que lo hacemos (en 2019 promocionamos Luisol y las pesadillas, Ed. Sélector). Me encanta la calidez de los lectores, el entusiasmo de los niños, la disposición y amabilidad de los medios de comunicación. Te puedo decir que me siento muy agradecida y bendecida por la manera en que me han arropado.
¿Nos puedo platicar sus impresiones sobre el trabajo editorial de un texto bilingüe y sobre las ilustraciones del mismo? (que son maravillosas)
Esta es la segunda ocasión en que trabajo con María Perujo Lavín, quien es una ilustradora maravillosa. Ha sabido captar y plasmar el alma y corazón de mis personajes. Aprecio y admiro su trabajo que es bellísimo. Esta versión bilingüe ha sido un proyecto muy divertido y lindo, además de innovador. La traducción inicial corrió por mi cuenta, aunque tuve un enorme apoyo y retroalimentación de mi hermana Francesca y de mi prima Kelly. A quienes les estoy muy agradecida.
Así mismo, el formato del libro bilingüe es muy original y ha tenido una muy buena aceptación. De un lado, el libro es en español, y al girarlo, con una portada independiente, lo encuentras en inglés. Sin duda es un libro que me está regalando muchas satisfacciones, y ayudando a cosechar nuevas propinas.
