No es fácil detectar cuando un artista está siendo completamente honesto, y es que allí recae buena parte de la decisión de otorgarle nuestra atención; y la otra parte es la calidad misma de las canciones… al final, se trata de una apuesta. Y Yarea nos entrega 9 canciones en apenas 25 minutos, pero algo me dice que puedo poner mi resto de fichas sobre ella.
Esta española tiene veintopocos años de edad y en Lombardia 22 -su disco debut- combina canciones de bedroom pop con ánimo indie, algunas referencias a lo urbano y un poco de rock. Ella dice que se trata de instantáneas de su presente y por lo que cuenta en sus temas podemos creerle.
Y es que tiene además de su lado a “Inercia”, una canción que comienza lenta y que luego eleva su esencia de pop electrónico que es absolutamente contagiosa y efectiva; en ella se acompaña de Sebastián Cortés, además de la presencia de Kickbombo, productor que remezcló también a Rigoberta Bandini -hasta unas guitarras metió en este tema de sintetizadores juguetones-.
Esta nativa de Bilbao nombró a su disco con la dirección de su hogar infantil; Lombardia 22 (The Music Republic) es un disco en el que la chica se vuelca sobre las letras y sin prejuicio alguno combina elementos musicales distintos; en “La lluvia” parece que vamos en una canción acústica y de momento acometen las percusiones digitales y un buen bombo.
Vale la pena darle la oportunidad a “El tango”, una canción de desamor que recurre a aquel género sudamericano, pero con una excelente producción y arreglo que transpiran actualidad. En este momento en España “Debajo de la mesa” ya ha alcanzado cierta notoriedad -a fin de cuentas, una canción de amor no consumado que cala mucho-.
Yarea levanta la mano y habrá que acordarse de ella; talento emergente que brilla con luz propio y mucho más logrado que el de artistillas que nos quieren colar por estos lares.
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