La banda argentina Los espíritus, que tiene a Maxi Prietto por delante, posee un gran poder hipnótico que al mismo tiempo tiene sabor latinoamericano… claro, es psicodelia, pero al estilo del sur del continente y ello le otorga tremenda personalidad sonora y distinción entre el resto de propuestas que desde allá emanan.
TXT:: Juan Carlos Hidalgo
Para su sexto álbum, el grupo ha tomado una decisión de peso histórico en cuanto al rock argento; encargaron la producción a Mario Breuer y la mezcla a Joey Blaney -la mancuerna que hizo Parte de la religión (1987) de Charly García. ¿Hace falta decir más?
Prietto y compañía sabían bien que esa pareja prodigiosa trabajó para Sumo y Andrés Calamaro, entre otros grandes, y ello suponía un avance en cuanto a la conformación de su propio sonido y de ello dan cuenta en La montaña y las 10 canciones que lo conforman, comenzando por el mantra que le da título.
Pero es en el tercer corte donde la magia brota con mayor intensidad; en “En este mundo no hay lugar” se sueltan las percusiones afroantillanas junto a ásperos riffs de guitarra y el agregado del saxofón de Dana Colley, procedente de la leyenda lustrosa del underground llamada Morphine.
Al respecto de la mezcla que hizo Blaney y de los invitados, Maxi Prietto apunta: “Nos dimos el lujo de trabajar con artistas que admiramos de toda la vida, Joe grabó y mezcló Bone Machine de Tom Waits, uno de mis discos preferidos, además de los discos de Keith Richards, The Clash y los clásicos de Argentina que hizo con Charly García, Andrés Calamaro y Los Ratones Paranoicos”.
Y es por ello que la fiesta no para; hay que mencionar que en “La fuerza” aparece el extraordinario guitarrista norteamericano Marc Ribot, quien repetirá en dos piezas más (“Directo al hueso” e “Hijo del hijo”, apenas una canción antes de que la voz y guitarra de Juanse -el ratón paranoico líder- alterne en “Av. Calchaquí”, que desparrama groove bluesero.
Para cerrar un círculo virtuoso de producción, encargaron a Greg Calbi la masterización del disco en el legendario estudio Sterling Sound, y así dan cuenta de lo que buscaban: “El currículum de Greg habla por sí solo. Viene masterizando discos desde hace mucho tiempo, estuvo detrás de discos que conocemos todos. Berlín de Lou Reed, Rock and Roll de John Lennon, Marquee Moon de Television, el primero de Ramones entre muchos más”.
Es así que en La montaña nos encontramos con “Ramas”, que cuenta con el gran Daniel Melingo en clarinete y sax y también pueden coquetear con el afrobeat en “Calles rotas”; Los espíritus potenciaron la parte de grabación con la certeza de que su capacidad instrumental es tremenda.
Los Espíritus están a un nivel superlativo en términos estéticos, por lo que resta que vayan agregando seguidores de modo exponencial; ellos deberían estar destinados a escalar hasta lo más alto del rock hispanoamericano. La banda dará cuenta de lo dicho en el Auditorio BB próximamente, así que sobran pretextos para escalar los montículos que sean necesarios con tal de alcanzar la cúspide.
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