Tras la aparición de Crawler (2021), el combo inglés anuncia un contraataque llamado Tangk. Idles prosigue así con un andar sólido, forjado a punta de guitarras amenazantes y voces desgarradas que se guardan poco. El aviso de la inminente llegada de un nuevo álbum de los cada vez más venerados autores de “I´m scum” viene acompañada de un sencillo: “Dancer”, un puñetazo derecho a la mandíbula.
Las once canciones que Tangk (Partisan Records, 2024) incluye fueron producidas, y sí, leerán bien, nada menos que por Nigel Godrich con la compañía de Mark Bowen y Kenny Beats. Es decir, estamos uniendo los talentos de quienes le han dado personalidad sonora a Radiohead, Travis y Beck, así como a Benee, Vince Staples y Denzel Curry. Pensando en todos estos nombres conviene decir que Joe Talbot ha contado que al hacer este trabajo requería afecto, y vale la pena leerlo pensando en su voz:
“Yo necesitaba amor. Así que lo hice. Le di amor al mundo y se sintió como magia. Este es nuestro álbum de gratitud y poder. Es todo canciones de amor. Todo es amor”.
Sobre el título del disco, es importante decir que representa una onomatopeya sobre cómo la banda se imagina que la colección de tracks suena, en especial las guitarras. En este rol, se la palabra se pronuncia tank. Teniendo esto detrás, las expectativas son altas alrededor de este trabajo, y el sencillo que arranca con la promoción no deja desilusionado a nadie. “‘Dancer‘ es la violencia que surge del corazón palpitante de la pista de baile, que recorre tu cuerpo y te da vida desde la música, desde el amor y desde ti”, ha dicho el propio Talbot.
Quédate con “Dancer”, mientras el resto de Tangk nos alcanza:
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