Mark Oliver Everett (Eels) es un músico excéntrico, elusivo… alguien que exalta esa fascinación por lo raro -aunque él quiera hacerse pasar por alguien excesivamente normal-. El asunto es que posee una gran habilidad para componer canciones en los que da cuenta de sus tribulaciones existenciales, de la vida de los solitarios y de aspectos muy peculiares y casi insólitos del mundo.
TXT:: Juan Carlos Hidalgo
Ya a mediados de los noventa, Eels nos ofrecía “Novocaína para el alma” y así ha prolongado una trayectoria que va del art-pop de cámara a formaciones de poder rockero que hacen estallar el escenario. Va cambiando de alineación según lo requiere y pasa de una orquesta a un trío de poder.
Ahora Eels se encuentra en una etapa de gran poder creativo, pues apenas a finales del 2020 lanzó Earth to Dora y no se ha detenido; para el 28 de enero de 2022 aparecerá Extreme Witchcraft, su álbum número 14 -sin contar directos y recopilaciones-, y ya se encuentra avanzando algunos sencillos.
El más reciente es “The magic”, en el que Eels retoma su poder más rockero, apoyado en la producción de John Parish, un músico siempre vinculado con Pj Harvey, y del que Mark ha dicho: “Si haces música con John obtienes cosas que nadie más puede hacer… Tiene una caja de herramientas y una perspectiva musical realmente únicas. Quizás su cortesía sea un mecanismo de supervivencia para mantener al Sr. Hyde bajo control cuando está fuera de su laboratorio”.
“The magic” se suma a “Good night on earth” y “Steam engine” como la avanzada de Extreme Witchcraft y deja sentir el poder de un buen riff guitarrero, pero también tiene por ahí un teclado que le da mucho groove al resultado final.
Eels ya anticipó que prácticamente todo el 2022 estará de gira, por lo que esperemos que podamos verlo por vez primera tocando en México.