El Columpio Asesino, grupo referente en la escena independiente, culminó su última gira de despedida en diciembre, marcando el fin de una era. Pasando por el Auditorio BB en Festival Marvin Gateway y cerrando en la sala Zentral de Pamplona fuimos testigo de su emotiva despedida, donde Ulecia, ya no estaba presente tras las 4 cuerdas pero, permaneció en el corazón de la banda y sus seguidores.
Nacido en Navarra, Ulecia buscó su destino musical en Los Ángeles en 1991, regresando temporalmente para sumarse a la banda, cosechando renombre en los albores de los 90. Su retorno a EE. UU. para estudiar en el Musicians Institute marcó su búsqueda incansable por la excelencia musical.
La música fluía en sus venas. Además de su destacado papel en El Columpio Asesino, compartió su talento en Cantina Bizarro, junto a su hermano Jon, y dejó su impronta como productor en su propio estudio, moldeando el sonido de diversas formaciones.
El año 2011 marcó un hito en su carrera al unirse a El Columpio Asesino para grabar Diamantes, un álbum que catapultó a la banda al estrellato, en especial con la emblemática canción ‘Toro’.
Los motivos de su fallecimiento no han sido detallados, sin embargo se sabe que el musico luchaba en contra de una fuerte enfermedad, misma que no le permitió acompañar a la banda en sus últimos shows.
El adiós a Ulecia será el sábado 2 de marzo en Pamplona, donde amigos, familiares y admiradores se reunirán para honrar su memoria en un emotivo tributo que resuena en los corazones de quienes valoran su legado.
Su música seguirá siendo un faro en la noche, guiando a generaciones con su talento inigualable. La partida de Dani Ulecia deja un vacío irreemplazable en la escena musical, pero su espíritu perdurará en cada acorde y en el recuerdo eterno de sus seguidores.
