Apenas comienza 2024 y los conciertos de metal ya van marcando ciertas tendencias. Hemos hablado aquí de la festivalitis que, por cierto, este año viene más cargada, pero también hay un fenómeno que si bien no es inédito, sí llama la atención: las giras más allá de la santísima trinidad de CDMX, Monterrey y Guadalajara.
Sirvan de ejemplo 10 bandas que a pesar de que la gran mayoría incluyen a las tres ciudades mencionadas, llevarán el concepto musical que los distingue a un total de 77 ciudades. Sí, en este punto es recomendable respirar hondo y volver a leer. 77. Claro, varias repiten, pero 77 conciertos internacionales que salgan de las tres ciudades de siempre es mucho decir.
Comencemos con las obvias, las que tienen suficientes fans en México como para venir cada año y tocar en ciudades de Estados de los cuatro puntos cardinales del país: Ángeles del Infierno y Mago de Oz. Tan solo entre ellos son 31 conciertos en por lo menos 20 entidades de la República. Y hablamos de plazas poco exploradas como Mexicali, Torreón o Tuxtla Gutiérrez. Y en todas ellas ha habido conciertos en años recientes, solo que eran muy esporádicos.
Los griegos Rotting Christ y los finlandeses Apocalyptica están a la mitad de una gira de 10 y 15 fechas respectivamente. Tarja Turunen ha anunciado hasta ahora siete, misma cantidad de To Die For, aunque estos últimos subieron las 100% confirmadas con una leyenda que explica que anunciarán otras más. Omnium Gatherum concluyó una ronda de cinco conciertos y Gamma Ray, Avatar y Dark Tranquillity tienen cuatro cada una. Estas últimas tres coinciden en la terna CDMX, Guadalajara y Monterrey, pero cada una suma otra ciudad extra y casualmente ninguna es repetida.
Toda proporción guardada, esto es similar a las giras que hacen las bandas en Estados Unidos. Aquél es un país con más del doble de habitantes que el nuestro y con una industria para el metal mucho más establecida que la nuestra, pero aún así hay coincidencias. Obviamente en ciudades más pequeñas, las audiencias serán igualmente reducidas. Tampoco es lo mismo tocar en fin de semana que hacerlo en martes. Todo influye, pero haya giras en tantas ciudades quiere decir que las bandas no temen girar por nuestro país, que saben que no en todas las plazas cobrarán lo mismo ni atraerán la misma cantidad de gente que en las más grandes, pero que aún con estas condiciones, los promotores locales consideran que pueden hacer negocio.
Lo más importante es que la gran mayoría son eventos en los que hay bandas mexicanas como invitadas o abridoras. Es un paso que parece pequeño, pero para ellos es enorme pues los pone en el mapa, les permite ver como funcionan las bandas profesionales, y les deja saber qué tanto les falta o no para ganarse a una audiencia que no necesariamente está ahí por ellos. Son las ventajas de la globalización y la nueva realidad post pandemia, y por lo pronto, es un cambio bienvenido a la cultura metalera del país. Igual que las bandas abridoras, cada ciudad que recibe por primera vez una gira internacional con grupos del calibre de todos estos se convierte en un criadero potencial de nuevos metaleros, y eso nunca estará mal.
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