Desde NY un disco lleno de amor filial, por un robot. Corntuth publica Letters To My Robot Son. Synth wave minimal de delicadeza inusual.
Décadas en el futuro, al final de la humanidad, un padre deja una cinta de datos para su hijo robot. Al igual que algunos sintetizadores analógicos de mediados de los años 80, los niños robot se programan a través de secuencias de sonido en cintas de casete magnéticas. Este padre, un inventor, ha compuesto una serie de módulos que cree que podrían hacer que su hijo robot sea consciente.
Así describe el artista el concepto de Letters To My Robot Son, un álbum que supera el género ambient por su minimalismo sinfónico (algo muy meritorio de lograr) propio de la synth wave fílmica. Pero no hay imágenes trenzadas en la música de Corntuth, hay emociones profundas. Un serio ejercicio de amor a través de la música a un robot. Si lo hay por un perro al que se otorga características humanas, ¿cómo no a un robotito que nos despierta entre caricias de metal? Corntuth lo logra usando secuencias de un Korg Poly-800 mkII de 1985 y sonidos de un Yamaha DX7 de 1983.
Letters To My Robot Son es el tercer LP de Corntuth. , este disco traza un viaje desde módulos ordenados y secuenciados hasta un ambiente nebuloso y extenso.
No podemos dejar de nombrar el magnífico trabajo visual en las cubiertas de Corntuth por parte de la ilustradora Cynthia Alfonso.
