En 1884 la banda de guerra del Octavo Regimiento de Caballería del gobierno de Porfirio Diaz fue a Nueva Orleans a amenizar un festiva textil. Después del rotundo éxito de la orquesta, dirigida por Encarnación Payén, varios miembros se quedaron en la ciudad norteamericana a cotorrear. Los tonos resplandecientes de las trompetas flotaron sobre las calles, los muelles, y las olas del rio Mississippi, arrastradas por el salado viento caribeño. Desde este sitio mágico dejaron una huella del tamaño del mundo. Muchos siempre lo hemos sabido en nuestras entrañas. Ahora está científicamente comprobado. El jazz es un subgénero de la música mexicana. Y en pocas cosas se escucha tan claramente como en el manejo de los cobres.

Por lo mismo, confiamos en que Don Encarnación y la Banda de Guerra del Octavo Regimentó de Caballería estarían contentos con la programación este viernes en la colonia Narvarte del octavo Azarret La Tehuanita. Con Felipe Peralta en trombón y David Contreras en saxofón alto, Rodo Ocampo en batería y Toto Merino en bajo eléctrico – juntos los Brasstards – al pie del cañón, se espera una noche de música icónica en el simpático restaurante istmeño. Este grupo de jóvenes talentos de la escena de improvisación libre cuenta ya con una década de homenajes a los instrumentos de cobre.

La cabalgata inicia con un dueto de Ocampo y Peralta.

La escena de música experimental mexicana ha producido a menos tres grandes trombonistas. Muchos ya han escuchado de la excelente técnica del instrumento de Xavier Frausto de Aguascalientes, un personaje ya reconocido en el mundo del arte sonoro contemporáneo. El gran trombonista oaxaqueño Kunt Vargas con su grupo de improvisación de la Sierra Mixe, Los Pream, ya está cada vez más integrado en la conciencia cultural de México. Pero el tercero, Felipe Peralta, de Cuernavaca, solo es conocido por sus compañeros músicos que compartieron las noches solitarias de los conciertos experimentales a contracorriente, con el corazón al timón y el viento en la nuca. Su contemplativa, perturbadora y virtuosa ejecución en el trombón es testimonio de los años en las trincheras de la improvisación. Además de los Brasstards, Peralta se ha destacado con su dueto expresionista con el baterista Eduardo Herrera, La Perrera Municipal.

En el segundo dueto están Toto Merino y Rodo Ocampo.

Rodo Ocampo es un joven veterano de mil batallas en varios géneros de música, uno de los bateristas claves que mantiene a flote la aventura musical en la Ciudad de México. Cada vez se mueve con ligereza y arte hacia mayores éxitos, como evidencia está la invitación que recibió para ir en julio al Worldwide Festival en Séte, Francia, del legendario dj de la BBC, Giles Petersen, con Ana Ruiz y su Orquesta Kóryma. También toca con Sesión Libre Trio con el brillante saxofonista tenor Ernesto M. Adriano y la contrabajista Adriana Camacho. Destaca por sus estudios de la percusión global. Ocampo es egresado la Escuela Desarrollo Integral Musical DIM en la Ciudad de México.

Pese a su relativa juventud, el dinámico bajista Toto Merino ya también tiene muchos años en las lumbreras del underground de calidad abriendo espacio en los géneros del rock progresivo, improvisación libre y música experimental. Cuenta con una gran técnica y conocimiento armónico e histórico. Combina finura progresiva y jazzística con una veta punk que le ha llevado a tocar con grupos como Luz de Riada, Inkal y Mekanik Kommandoh. Además, es un estudioso del ajedrez.

El excelso saxofonista David Contreras, también alumno del DIM, repetirá esta semana en La Tehuanita después de mesmerizar el público en el Azarret 07 el viernes pasado, destacándose en un elenco de primer y reconfirmando su estatus como uno de los mejores jóvenes saxofonistas de improvisación del país. Saco el disco Mundano con sus composiciones en 2021 y es parte del grupo Anti-Sax. Contreras se lanzará al Worldwide Festival junto con Ocampo como parte de la presentación de Ana Ruiz y su Orquesta Kóryma.

En el tercer set se juntarán todos para tocar como Los Brasstards, grupo mítico de freejazz del underground mexicano. La cabalgata sonora pinta enérgica.

El concierto es parte del ciclo de experimentación musical Azarret La Tehuanita, con la curadora invitada, la poeta y editora Clau Arancio de Argentina.

No podemos escuchar Don Encarnación y la Banda de Guerra del Octavo Regimentó de Caballería de Porfirio Díaz. Pero indudablemente podemos presenciar la evolución de esos tonos arrojados hacia el cielo hace 140 años por el Mississippi, llevados por los vientos del norte a casa.

“La Tehuanita”, restaurante 100% indígena con dueños zapotecos, sirve platillos del Istmo de Tehuantepec de gran sabor y es la sede de esta nueva edición del “Azarret”. También ofrece diversos tipos de mezcal oaxaqueño. Cuenta con una terraza cubierta en la banqueta que hace la estancia en la lluvia cómodo, si es al caso, sentado en una mesa con un mezcal en una mano y una tlayuda en la otra mientras se escucha las gotas y la música más candente de la Ciudad de México. Aunque el flyer indica que iniciará a las 19:45 probablemente tarden 45 minutos más, como suele suceder en la escena de improvisación de la Ciudad de México.

Los Brasstards: David Contreras (saxofón alto), Felipe Peralta (trombón), Rodo Ocampo (batería), Toto Merino (bajo eléctrico), viernes 14 de junio, 19:45, La Tehuanita, Diagonal San Antonio 1513, Col. Narvarte Poniente, Ciudad de México

Ana Ruiz y su Orquesta Kóryma están rifando importantes obras de los icónicos pintores Antonio Gritón y Jazzamoart para complementar para los boletos para ir al World Wide Festival el 7 de julio. Si quieren apoyar al mítico viaje de Ana Ruíz y su orquesta aprovechen la oportunidad de ser parte de la historia. El sorteo es 23 de junio.