Luego de que los miembros del SAG-AFTRA se unieran a la huelga de escritores, algunos actores han alzado la voz sobre las malas condiciones laborales en la industria del cine y la televisión. Uno de ellos fue Kimiko Glenn, reconocida por su papel en Orange is the new black, quien a través de TikTok compartió su experiencia.
Además de mostrar que su más reciente cheque por ingresos residuales fue de 27.30 dólares, la actriz compartió un clip en el que dice lo siguiente: “Nunca nos pagaron muy bien. Cuando digo ‘no me pagaron muy bien’, se mueren. Las personas seguían siendo bartenders, seguían teniendo un segundo trabajo. Eran jodidamente famosos, internacionalmente famosos, que no podían ni salir, pero tenían que conservar su segundo trabajo porque no podían darse el lujo de dejarlo. No podíamos pagar los taxis”.
En respuesta a los comentarios que intentaban restar importancia a la baja cantidad residual diciendo que a los actores se les pagaba por adelantado por sus actuaciones, Kimiko Glenn dejó una cosa en claro: “Ya sea que nos paguen por adelantado o no, mis tetas vivirán ahí por siempre. Merezco que me paguen por cada vez que esa mierda sea reproducida”.
“[Compartir los detalles del cheque residual no fue] denunciar a Orange is the new black por alguna injusticia”, explicó en otro video. “El problema fue que éramos los primeros de su tipo, por lo que todo el mundo estaba aprendiendo sobre la marcha. Ahora han pasado 10 años… la lucha realmente es negociar mucho. Es por eso que muchos actores realmente quieren atacar”, agregó.
