Por Horacio Warpola
En el transhumanismo todo está permitido, bueno… casi todo. En este capítulo 9 de los viernes sinestésicos de CutOut Fest, nos posicionamos en la virtualidad de los cuerpos para trascender hacia el mecaorganismo. El poeta Horacio Warpola hunde el teclado en tres videos inmersivos, breves y brutalistas. Desde cuerpo glitcheado hasta los origamis renderizados, el humanismo se metamorfosea con lo invisible y lo abstracto.
JOYFULTALK – Peace Fight
El ser humano es el glitch original. La capacidad de los cuerpos se extenderá hacia la virtualidad de los objetos. Cualquier transhumanismo concederá un deseo de expansión. La mente y los algoritmos en una sola ecuación advertirán de las épocas futuras. Un nuevo mundo. Un nuevo cuerpo. Un nuevo organismo.
Bjarki – Bacteria Ben
Después del humano, después de los robots, después de los extraterrestres, después del apocalipsis, se abre el mundo en dos y llegan las criaturas. Así… criaturas, sin más. Algunas vienen del infierno, otras vienen de las dimensiones alternativas, todas devorando y asimilando su propia mitología. Ya no quedan restos de humanidad, solo algunas infamias que permanecerán por millones de años en el plano del caos.
Booker Stardrum – Trash Island
Formas elásticas similares al papel se extienden hacia la perduración de la materia.
Un noise nos recuerda que la pronunciación es otro síntoma de la bacteria llamada lenguaje.
En el transhumanismo la abstracción ya es parte de la mecánica del tiempo.
Todos la entienden.
Todos la ven.
Todos la añoran.