No es nuevo que Sune Rose Wagner y Sharin Foo, la pareja que encarna a The Raveonettes, se haya asomado a la música del pasado en su carrera; han ido diseminando algunas versiones muy escogidas que proceden de la licuadora del tiempo y que se ajustan bien a toda esa bruma de distorsión que les fascina.
A los daneses habría que definirlos como una banda de rock, más que como parte de la andanada shoegaze, pues ciertas maneras de los Everly Brothers y Buddy Holly suelen aflorar entre ese tupido bosque de frondosas y crepitantes guitarras que levantan. El hecho es que siempre han mostrado gran tino para elegir material ajeno y que ahora les sirve para editar un disco que los mantiene vigentes, mientras se prolonga la racha de 8 años sin material propio. No es sencillo conformarse con un disco de covers, pero The Raveonettes poseen la magia para convertirlo en una experiencia fascinante.
Basta con mencionar que han optado por “Will you love me tomorrow”, una maravilla inmortal hecha por The Shirelles y vinculada a la magia de Phil Spector; aquí se expone casi desnuda… apenas con detalles de percusión y campanitas para dejar que la voz de Sune Rose Wagner conduzca una aventura de apenas dos minutos y 32 segundos que se hace eterna.
Pero no podemos hacer menos a “All I Have To Do Is Dream”, un clásico de parte de sus amados Everly Brothers y que se antoja listo para sonar en cualquier trabajo por venir de parte de David Lynch… lo angelical tiene un lado perverso. En The Raveonettes sing se reitera esa pátina tan vintage que les gusta -como sacada de un viejo vinilo-, los ritmos se ralentizan para que retumben misteriosos mientras las guitarras esparcen su maraña ruidista por doquier.
Se trata de una entrega llena de afortunadas sorpresas; claro que nos descolocan cuando emprenden “Venus in Furs”, una gloria de The Velvet Underground y emprenden con ella un ritual en el que la malignidad se mezcla con la dulzura. Pero también debemos celebrar la manera en que se apropian del country y retoman una pieza editada en 1974 por parte de Gram Parsons y Emmylou Harris; “Return of the Grievous Angel”, resultó un importante reto creativo y una nueva senda sonora sobre la cual viajes rumbo a territorios ignotos.
The Raveonettes siguen alimentando su repertorio lleno de ecos fantasmales, de neblina eléctrica; poseen un gran porte y ese toque vintage enigmático que se engrandece; se nota que conocen su esencia y es por ello que grabaron este álbum mientras celebraban el año pasado sus 20 años de carrera. Al referirnos a ellos siempre afloran la magia y el misterio… cualidades que no muchos pueden aludir… es rock suspendido en el tiempo.
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