TXT :: Alejandro Acevedo.
Los bailarines de la gira “Blond Ambition Tour” (1990) podrán estar enojados con Madonna porque no les pagó lo que ellos consideran justo (regalías por la película En la cama con Madonna, por ejemplo), pero no pueden dejar de agradecerle a La Reina del Pop haberlos catapultado a una fama que jamás soñaron. “Madonna nos enseñó a trabajar –comenta el bailarín Xtravaganza-; con ella aprendimos a leer un contrato”. “Mind over matter”, era por aquellos tiempos el lema del La Chica Material.
Más que conscientes están de que al ser elegidos por Madonna como sus bailarines se les abrieron muchas puertas. Preparación, disciplina y sobre todo suerte son algunos de los elementos que conducen al éxito.
Esta es la tesis que subyace en el documental Strike a Pose (Gould-Zwaan, 2016) que a 27 años del Blond Ambition Tour y de la cinta En la cama con Madonna redescubre a seis de los siete bailarines (uno de ellos falleció de sida en 1995) que la acompañaron en la mejor gira de la mega estrella que en estos momentos está cumpliendo 60 años.
Demasiada “fiesta” ha impedido que la mayoría de estos muchachos que en 1990 tenían entre 18 y 20 años no hayan destacado en la industria del entretenimiento, pero lo que no les quita nadie es haberse convertido aquel 1990, en modelos a seguir para muchos jóvenes que entonces se decidieron a salir del clóset al ritmo de la música de Madonna.