“Shiki es una palabra que tiene muchos significados en japonés. Significa que es la hora de morir, las cuatro estaciones, conductor de orquesta, color, ceremonia, moral, pero los temas principales en el disco son la hora de morir y las cuatro estaciones. La parte de la hora de morir tiene que ver mi miedo a la muerte y las cuatro estaciones significa que si la vida de una persona tiene cuatro estaciones, yo tengo 52 años, eso significa que estoy en la parte final del otoño, ya pasó la primavera, ya pasó el verano y ahora estoy en el otoño, esperando que llegue el invierno y después de eso, no habrá primavera, a diferencia de las cuatro estaciones reales, que se repiten. Todo gira en torno al miedo a envejecer”.
Es Mirai Kawashima, tecladista, cantante, compositor y fundador de Sigh, una de las expresiones de metal extremo más reconocidas de Japón que tocará por primera vez en México en el marco del Candelabrum Metal Fest. Shiki es el décimo segundo larga duración que edita la banda y estará disponible el próximo 26 de agosto mediante el sello británico Peaceville Records. Normalmente Sigh canta en inglés y a veces incluye algo de japonés, pero este disco será una excepción pues las canciones, todas, están en el idioma natural de Mirai. ¿La explicación? Después del video de “The curse of Izanagi”:
“En esta ocasión quería expresar mi miedo a envejecer, a morir, y hacerlo de la manera más honesta y más directa posible, entonces para lograr ese objetivo, tenía que usar mi propia lengua. Ahora, el heavy metal y el rock en general fueron creados en la cultura occidental y creo que ambos géneros están totalmente conectados con el ritmo de la lengua inglesa. Yo crecí escuchando discos de metal cantados en inglés así que cantar en ese idioma me parecía algo muy natural. Además, los fans de Sigh son predominantemente estadounidenses y europeos así que mi intención era que ellos entendieran lo que estaba cantando, por eso he usado el inglés tantas veces pero en esta ocasión hice la excepción y usé mi lengua natural para expresar ese miedo a la muerte que tengo y poder transmitirlo tan directamente como fuera posible”. Más adelante en la charla dijo que además la música tiene un ambiente muy tradicional japonés, así que la banda, de por si llena de extravagancias auditivas, ahora sumará todo eso a lo largo de 46 minutos de música.
Se acerca el Día Internacional de la Música Extraña. Esa palabra puede ser ofensiva para los músicos y Sigh ha pasado por ahí. En 1997 cuando editaron Hail Horror Hail, su tercer larga duración, la banda incluyó un mensaje en la contraportada que decía “cada sonido en este disco es deliberado y si te parece que algunas partes suenan extrañas, no es porque la música en sí misma sea extraña sino que tu ser consciente no está equipado para comprender los sonidos producidos en este disco”.
Sigh es considerada por algunos como Avant Garde Metal o Metal Experimetal. Al preguntarle si tiene alguna frontera imaginaria que no querría cruzar con su música, su respuesta fue interesante. “Cada vez que escribo canciones las grabo como demos en formato midi, y luego las escucho una y otra vez y cambio los arreglos hasta que estoy completamente satisfecho con el resultado, entonces no hay una fórmula, la única herramienta son mis oídos. Escribo, grabo y lo arreglo hasta que considero que la canción fluye lo suficientemente bien. Y luego bueno, yo creo que en la música no hay límites o fronteras pero cada canción tiene que ser por lo menos Heavy Metal. Sigh es una banda de Heavy Metal, podemos tomar todo tipo de inspiraciones externas pero al final del día tiene que ser Heavy Metal, al menos tiene que llevar esa guitarra fuertemente distorsionada, es el punto central de la música de Sigh”.
Recientemente se agregó a los canadienses Voivod, una banda también muy experimental al cartel del Candelabrum, y Mirai no solo está enterado sino que está feliz. “Es un cartel fantástico, soy un gran fan de Candlemass y Over Kill es una gran banda también y escuché que Voivod se acaba de sumar. Voivod es una de las grandes influencias en la música de Sigh, tocar con ellos ha sido una de las mejores experiencias que hemos tenido en nuestra carrera”. Más adelante los mencionó de nuevo. “Celtic Frost y Voivod son las dos influencias más grandes, lo fueron desde el principio y lo siguen siendo ahora, son la inspiración más grande para mi como persona y para Sigh como banda.
Mirai Kawashima es una leyenda mundial que según sus propias palabras no vive de Sigh porque “en Japón no se puede vivir de la música extrema, por eso hago muchos trabajos como ser periodista musical, trabajar para una disquera y ser traductor musical”. Su presentación en Candelabrum Metal Fest marcará la primera vez que toquen en México luego de 33 años de carrera.