Uno de los provocadores sonoros más interesantes que habitan el subsuelo y que resultar ser tan confrontativo como violento en su sonido es: Mito del Desierto.
TXT:: Sebastián Franco
Mito del Desierto, posee un poder que se ve enclaustrado por paredes de sonido cercanas al noise o al industrial y sus derivados. Un sonido que agrupa ruidos y atmósferas cáusticas que se encuentran con panoramas helados.
El ruidista acaba de lanzar su último lanzamiento a través del sello capitalino Hole Records – responsables también de lanzar material de Mabe Fratti o Tajak, por mencionar algunos- titulado Tótem.
En este material el nativo de Monterrey, NL, se ha encontrado con capas de sonido mucho más llevaderas, donde se cobija por sonidos coherentes que se encierran en un solo diálogo. Lo que pareciera un avance en el sonido del músico que, lo lleva a espacios mucho más abierto a las posibilidades de jugar con la acústica y las capacidades infinitas que provee el ruido que emanan sus máquinas.
Una prueba de ello, es “en sigilo” un track casi letárgico que acompaña el violento discurso del disco, pero que no decae en la tónica del mismo, al contrario, suma una capacidad cíclica de repetir los sonidos pero sin caer en la monotonía, acompañado de alaridos que se alcanzan a percibir entre la estática y los metales que parecieran golpear el concreto.
Otro track que prevalece en esta placa es, “en fango de fuego” un corte que sorprende por atmósferas densas y juegos sonoros tribales que se arrojan a una sensación chamánica la cual se ve posicionada en una puesta oscura, llevada por voces y cadencias que conspiran entre la glosolalia, los susurros y la mixtura del ruido que se va formando conforme avanza el track, uno de los cortes más sobresalientes del disco.
Por otra parte “veo” y “cabezas” son dos cortes que acompañan a cerrar el disco y que cada uno pareciera representar el pasado y el futuro de la obra del artista. Dos tracks que demuestran la capacidad ruidista del músico y el cambio hacia donde pretende avanzar su obra, entre explosiones y sonidos abruptos que hacen que los sonidos se vuelvan casi palpables, una torura sonica casi abrumadora.
Tótem, es un acierto en el acervo musical de Mito del Desierto, un disco que no pasa desapercibido en lo que va del año. Un álbum que se arroja a un abismo en espiral de sonidos violentos y llenos de atmósferas oscuras y pesadas. Un álbum que manifiesta tanto ira como desesperación, que acompaña el encierro en el cual estamos sumergidos como escuchas. De técnicas rudimentarias y poco amables, Tótem, no cede ante concesiones externas, sino que, plasma una muestra de lo que representa la identidad de Mito del Desierto como artista. Un álbum que sorprende con cada escucha, y que se reconoce así mismo entre rituales, ruido y cólera.
