Quizá los clichés turísticos nos dejen a Austria como una tierra de música clásica y con muchos valses por delante, pero la realidad es que también es tierra de música electrónica de muy buena calidad, que incluso se mezcla con el pop, como en el caso de Farce, ¡una deliciosa sorpresa!
TXT:: Juan Carlos Hidalgo
Instalada desde hace tiempo en Viena, aunque nació y creció en la provincia, Veronika J. Koening, la mujer detrás de Farce, recién ha editado Not to regress, un álbum conformado por 10 canciones en el que ciertas maneras indie se juntan con una electrónica upbeat, pero alimentada por bajos gordos y crepitantes.
Farce se apoya en una voz aterciopelada que no es tan aguda, sino que tiene cuerpo; debajo dejar correr ese torrente de secuencias y cajas de ritmo para dar con canciones tan magnificas como “Trophy Wife”, tan llena de ironía para todas aquellas mujeres convertidas en un premio para sus maridos y carentes de opinión algunas.
Not to Regress nos remite a la Ilustre historia de Everything But The Girl, a la manera en que creaban poderosas imágenes y contaban historia cobijados por el pop electrónico. No es un asunto menor que el disco contenga “Thee Silence”, una reconstrucción de “Enjoy the Silence” de Depeche Mode, hecha junto a su compatriota Soap&Skin -¡Una rareza imperdible para los seguidores de los ingleses!
Para la parte más actual del disco, Farce ofrece “Dejá Dub”, un tema más lento y denso en compañía de Old Grape Gold y Aether Kombo, que nos remite al hip-hop mutante que hace Ghostpoet.
Not to Regress es pop electrónico que encantará a los interesados en Robyn, MØ y Aurora; se trata de una artista que con su tercer álbum busca penetrar en la competida escena internacional, esperemos que lo consiga. Este álbum se deja paladear con frescura y sorpresa.
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