Colores básicos es la séptima entrega de la colección Onda Nueve de Editorial Gato Blanco, dedicada a narrativa disruptiva de autores nacionales e internacionales. En ella, Fernando Tamariz nos entrega una antología de cuentos que coquetean todo el tiempo con la fantasía.
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Acompañados por las ilustraciones de Leonardo Tamariz, suponen un compendio de historias desafiantes y desbordantes de imaginativo. Tamariz retoma arquetipos y referencias de la literatura universal que, como en el caso de El arpón y el capitán, perfila muy bien sus intereses.
El arpón y el capitán
El capitán tenía un arpón insaciable. Lo encajaba profundo mientras ellas chillaban y se removían. Su mayor placer no estaba en cobrar la pieza sino en contemplar el poder destructivo de su arpón. Hería porque podía, porque la vida o la muerte de las ballenas era una continuación de su voluntad y el arpón el brazo armado que la cumplía.
El arpón del capitán se hundía en la carne simplemente porque su acero era más fuerte que la piel, que los músculos y que los tendones de las ballenas, por demostrar la fragilidad de las gigantes.
Sin embargo, su mutua frustración era una ballena blanca que surcaba las aguas con un desparpajo que rondaba la desfachatez, nadando al alcance de la vista del capitán, pero lejos de la punta asesina del arpón. Una bestia que los enfrentó con fiereza y altivez, hasta cobrar del capitán su pierna izquierda.
Los eludió por años, tan completamente, que el capitán volvió a puerto en medio de la vergüenza autoinfligida, arrastrando la pata de hueso sobre las tablas del muelle, surcando la madera con el canto de su arpón despuntado a fuerza de muertes sin valor.
Con el arpón herrumbroso a sus pies, hoy es un anciano que no se acuerda cuántas mató ni cómo era hundirles el acero. Habla en cambio por horas de la que no pudo tener, mientras lo sala la brisa del mar.
Los que lo observan sentado en el puerto lo compadecen y maldicen a la ballena orgullosa que le secó el alma.

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