Urbano venezolano en su máximo punto de expresión. Vocoder, beats lo suficientemente perreables, pero sin cruzar la delgada línea existente entre el reguetón y trap. Coreografías dignas de J. Lo, Rosalía o Dua Lilpa. Flow, talento y belleza. Ella es Carmen DeLeon, un cóctel musical que se saborea en “BBB” (Capitol Records, 2022).
TXT:: Joel Rodríguez
“BBB” es el lanzamiento más reciente de Carmen DeLeon, el arquetipo perfecto del diseño sonoro dominante en la corriente principal. Sin complicar el asunto, estamos ante dos minutos con treinta y cuatro segundos donde se narra una ruptura amorosa que no podría contarse de mejor forma: todos los recursos centennials están ahí, hablándole a quien deben de hablarle y dándole voz a cientos de mujeres jóvenes que, posiblemente, reconocerán a Carmen DeLeon como un ícono femenino latinoamericano en un futuro cercano.
Mención aparte para el estilo vocal de la cantante, tremendamente influenciado por la tradición española flamenca, además de contribuir en el desarrollo de una pared sónica que le otorga un sello único. Algo difícil de conseguir dentro de la fábrica de pop reciclado más grande del mundo.
La producción de “BBB“, es impecable, todo se localiza en primer plano: limpio, fuerte y claro; bien armado y estructurado. Probablemente, de primera intención, puede sonar como algo que se ha escuchado hasta el hartazgo; pero no, su gran mérito artístico radica en que el concepto ha escalado peldaños, elevando el valor y calidad de la propuesta al reinventar elementos recurrentes en la obra de gente como Danny Ocean y Karol G. A la espera de sus próximos pasos. A saber cuál dirección tomará la brújula de Carmen de DeLeon.
