Nuevo trabajo de la compositora estadounidense Jill Fraser. Earthly Pleasures es un acercamiento ambiental sonoro al legado tras la muerte.
Indagar en nuestra marcha y su huella es labor quimérica. Solo el arte supera límites imposibles para la ciencia por ahora.
Jill Fraser es una figura clave de la música electrónica avanzada. Su dominio de los sistemas de síntesis modulares analógicos llevó a la compositora a realizar música para películas, televisión y publicidad desde los años 70.
Poner música a las marcas Lexus, BMW, Honda, Porsche, Nissan, Mazda, Mitsubishi, Suzuki, NBC, Apple, Adidas… significa definir la contemporaneidad.
Su obra estrictamente musical sin ser abundante es de lírica sobrecogedora.
Ahora en la edad tardía Fraser publica el álbum Earthly Pleasures.
Fraser hace un balance de generaciones y vidas de memoria, especulando sobre cómo se podría interpretar el espíritu de nuestras canciones después de que nos hayamos ido.
Un álbum de gran delicadeza que procura significar lo etéreo como un consuelo del dolor físico de la perdida, la enfermedad y la muerte. Un LP de momentos modulares, otros más minimalistas, cerca del ambient pero también de un progresivo synth.