Lo nuevo de Alex Ferreira suena igual a las baladas que emergieron de Un domingo cualquiera, aunque esta vez sus canciones se acercan al jazz. En lo que llega la primavera recopila historias de amor a destiempo; 8 tracks a través de los cuales se van hilando sentimientos que tocan de modo tangente a la melancolía.
TXT:: Evelyn Mazón
“Una vez leí que las matemáticas nos cuentan las 3 historias de amor más tristes: la de las líneas paralelas que nunca pudieron encontrarse, la de las líneas tangentes que estuvieron juntas una vez y luego se separaron para siempre, y la de las líneas asíntotas que solo podían acercarse más y más, pero nunca podían estar juntas” dice Ferreira a propósito de “Hubo algo“, el primer single que se publicó de su más reciente álbum.
A pesar de que En lo que llega la primavera podría parecer fatalista en comparación con Tanda (de ritmos más avivados), lo cierto es que la música está tan bien orquestada que resulta un alivio poder atestiguar la evolución sutil de Alex. En lo que llega la primavera posee melodías similares al renacer de las hojas. Por ejemplo, “Amor de paso” se centra en la búsqueda de respuestas a los sentimientos que surgen en un romance donde no hay nada certero, sin embargo, acompañada con acordeón y coros, la canción culmina como una buena experiencia.
La melodía que lleva el mismo nombre del álbum, sin voz y solamente con el sonido del piano en la intro, un saxofón infringiendo la tranquilidad y una batería que le da sentido a toda la mezcla, podría representar al miedo que surge cuando se desnuda el alma ante los demás, sin adornos excesivos. En lo que llega la primavera fue grabado en El Desierto, donde la magia de los árboles se unió a la voz de Ferreira en colaboración con Vanessa Zamora y Silvana Estrada.